Dehesa de Los Llanos, desde 1893


A tan solo 5 km de Albacete, con una superficie de 10.000 hectáreas y como un solo predio desde el siglo XVII, se encuentra Dehesa de Los Llanos.
En Dehesa de Los Llanos la historia se mezcla con la leyenda. A lo largo de los siglos la finca se ha convertido en uno de los principales puntos de encuentro en la vida económica, social, cultural y religiosa de Albacete. Sus tierras han sido, desde lugar de peregrinación y romería, convento franciscano y sede de la feria de Albacete, hasta residencia del Marqués de Salamanca, del Marqués de Larios y del Marqués de Paul.
La leyenda cuenta que aquí se apareció la Virgen de Los Llanos, patrona de la ciudad de Albacete. A partir de este momento este fue un destino de romerías y peregrinaciones.
En el año 1647 se establece, en Dehesa de Los Llanos, una congregación de monjes franciscanos, que se dedicaron a la agricultura y ganadería, además de crear intensas relaciones comerciales.
Una vez expropiadas las tierras, con la desamortización de Mendizábal, fueron a parar a manos del marqués de Salamanca, quien insistió personalmente en su adquisición, ya que estas tierras tenían un importante significado para él. La presencia del marqués de Salamanca coincidió con uno de los momentos de máximo esplendor de Dehesa de Los Llanos.
Pasó el tiempo, y el marqués de Salamanca cayó en la ruina. A partir de 1893 José Aurelio Larios Larios compró la finca y, desde entonces se ha mantenido como propiedad familiar.
En 1974 entra a formar parte de la Sociedad La Humosa SA que agrupa todas las actividades agrícolas de la familia y en 1993 se integra al Grupo Mazacruz, al que aún pertenece hoy.

ENTRADA A LA FINCA
Foto Original de Jaime Bleda. Año 1928.