Llega septiembre: mes de la vuelta al cole, a la rutina, la feria de Albacete, la vendimia… Nosotros la hemos comenzado ya, con nuestro Sauvignon Blanc. Es una de las variedades de uva blanca más importante del mundo, y aquí hablaremos un poco más de ella para que la conozcas mejor.
La Sauvignon Blanc es una variedad de uva francesa, con origen en Burdeos y el Valle del Loira. Respecto a su nombre, proviene de la palabra francesa sauvage, que significa «salvaje».
Sus racimos son compactos, de tamaño mediano, con bayas pequeñas. De brotación temprana, la variedad Sauvignon Blanc aguanta bien el frío, y se adapta favorablemente a los suelos nuevos, por eso, es cultivada en casi todo el mundo (a excepción de Asia); podemos encontrar Sauvignon Blanc en: Francia, España, Italia, Argentina, Chile, Sudáfrica, Canadá, Australia… con una mención especial a Nueva Zelanda, donde se ha convertido en la variedad de uva más popular del país, responsable de magníficos vinos blancos.
Debido a que se cultiva en tantos lugares es difícil hacer mención a sus propiedades, pues estas varían dependiendo del clima y la región. Aunque sus vinos tienden a ser frescos, secos, con una elevada acidez y aromas herbáceos. Suelen consumirse jóvenes.
La Sauvignon Blanc marida muy bien con los productos del mar, siempre que se cocinen al vapor, o a la plancha y no con complicadas salsas, además de ensaladas y aperitivos. Es perfecto para el verano, como buen blanco fresco. Su temperatura de consumo ronda los ocho grados.
La Sauvignon Blanc es la protagonista de muchos vinos monovarietales, pero nosotros hemos decidido ensamblarlo con Verdejo, y el resultado, lo podéis comprobar en nuestro Mazacruz Blanco 2016.